Beneficios para las instituciones
- Ahorra tiempo y reduce errores a través del intercambio automatizado de información y con la interoperabilidad entre diferentes sistemas informáticos.
- Administra el nombre de la institución u organización, para estandarizar su designación y no perder métricas. Además, permite una mejor conexión entre ella y sus investigadores.
- Mantiene y consolida vínculos con su investigadores (pasado, presente y futuro).
- Agrega a los procesos internos de evaluación de sus investigadores, un elemento objetivo de juicio (basado en evidencias debidamente registradas).
Beneficios para los investigadores
- Mejora la identificación y el reconocimiento del investigador, a través de una identificación unívoca (disminuye la posibilidad de confusión con otros autores).
- Se aprovecha mejor el tiempo dedicado a la investigación, al no dispensar tanto en su gestión.
- Registra y visibiliza la obra del investigador a nivel nacional e internacional, lo que facilita la recuperación de las publicaciones y a su vez, favorece en el aumento del número de citas y el impacto dentro de la comunidad científica.
- Facilita la tarea de presentar documentación para convocatorias y ayudas.
- El identificador se integra con las principales bases de datos bibliográficas y sistemas de identificación de autor, como la Web Of Science (WoS), Scopus, ResearcherID, CrossRef, entre otras.
- Es un requisito que se debe cumplir en las principales entidades que publican investigación.
Fuente de la imagen: ORCID (2018). IDC Infographic.
